Esta cadena de valor exporta a 60 países y genera divisas por U$S 700 millones al año. El experto Adrián Poletti dio un panorama de la situación mundial de los mercados y los deberes que tiene que hacer Argentina para potenciar su perfil exportador.

La cadena de valor de legumbres se ubica entre algunos de los complejos exportadores de peso, a partir de un ingreso de divisas que se ubica sobre los U$S 700 millones y ventas a más de 60 países.

Se trata de una actividad con un fuerte perfil de comercio exterior: de las 700.000 toneladas que se producen en cada ciclo, un 90% se destina a mercados externos.

En el marco de una jornada organizada recientemente por la Cámara de Legumbres de la República Argentina (CLERA). Adrián Poletti, asesor en producción y comercialización de cultivos especiales, analizó el panorama de las legumbres en Argentina y sus posibilidades a la hora de exportar.

El especialista destacó que en el sector atraviesa un buen momento, más allá de problemas climáticos y comerciales y destacó el peso específico que tienen en el NOA.

“Tenemos que pasar a crecer en términos de pensar el sistema, no pensar el cultivo, hay que pensar el sistema productivo y como el cultivo crece“, destacó.

En este punto, destacó la necesidad de pensar en el largo plazo y destacó la importancia de diagramar con anticipación las fechas de comercialización, para no chocar con la oferta de los competidores internacionales y de ese modo, perder rentabilidad.

EL POROTO BLANCO, CASO TESTIGO

Poletti puso como ejemplo el poroto blanco. En Argentina, el grueso de la oferta se concentra entre junio y agosto y luego se suma el volumen cosechado de Turquía y Estados Unidos.

“En 60 días concentramos toda la oferta mundial y toda esa mercadería termina bajando los precios” sostuvo.

Y agregó: “Bajan los precios de mercaderías que podrían haber sido vendidas en marzo a un precio mucho más alto y que no pudo ser porque no teníamos la seguridad productiva. Tenemos que romper ese círculo vicioso, repensando el esquema productivo desde un sistema que lleve a aumentar la producción y aumentar el potencial comercial de la Argentina”.

MERCADOS

En grandes rasgos, consideró que todo lo que depende de China muestra firmeza, porque ese mercado reforzó su papel importador. En alubias, consideró que habrá poco saldo exportable, mientras crece Egipto, un competidor cada vez más eficiente.

En garbanzos, destacó que Salta es -por segundo año consecutivo- la principal provincia productora. “Tiene una posición privilegiada, porque la cosecha anticipada de octubre permitirá captar la ventana de venta ideal”, sostuvo.

En este sentido, consideró que sería un error que los productores retengan su mercadería esperando mejores precios. Una vez superado el período octubre-febrero, explicó que el mercado mundial de garbanzos aparecen India y otros competidores. “No tiene sentido guardar mercadería y correr riesgos”, concluyó.

Fuente: Infocampo