El especialista de la Agencia de Extensión Rural de Arroyo Seco de Inta, Gabriel Prieto, aconsejó utilizar estas variedades como complemento del cereal de invierno. Las ventajas

Por Sandra Cicaré

El cultivo de legumbres puede aportar, en un escenario adverso por los años de sequía a cuestas y la baja humedad de los perfiles de los suelos, una solución rentable para el productor santafesino, en una campaña fina asociada con trigo. Gabriel Prieto, especialista de la Agencia de Extensión Rural de Arroyo Seco de Inta dijo que en la zona del sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires, durante el invierno solamente se siembra entre el 32 y 38% de la tierra disponible, y el resto está bajo barbecho. A su juicio, esa es una oportunidad única para encarar la producción de legumbres, como arvejas y lentejas, que no compiten en superficie con trigo o cebada, ya que se trata de cultivos de ciclo corto que, además, usan menos agua. La única limitante, dijo, es la falta de semillas producto de la sequía que afectó seriamente la producción en la última campaña.

“Primero deberíamos incorporar arvejas y otras legumbres al sistema productivo como parte de las rotaciones”, indicó y dijo que se trata de cultivos cuyo ciclo no supera los 120 días entre la siembra y la cosecha.

“Permite distintas alternativas como disminuir el riesgo empresario, porque hay otro producto para diversificar ingresos y se optimiza el uso de la maquinaria ya que se arranca con la siembra de trigo de ciclo largo en mayo o junio, se sigue en julio con legumbres y éstas se cosechan 15 días antes que el cereal”, explicó.

Por otra parte, las legumbres tienen varios destinos, “como exportación, comercialización para acopios o fuente proteica para los planteos ganaderos mixtos bovinos o porcinos”, agregó. Además, una legumbre como la arveja consume menos agua que el trigo.

“Venimos con reservas escasas y tenemos tiempo hasta julio cuando se siembran las variedades primaverales de ciclo corto”, dijo Prieto quien aseguró que si llueven en el invierno unos 150 mm, el cultivo responde bien. “Si se cumplen las perspectivas para el trimestre de temperaturas por encima de las normales y esto hace que el temor por las heladas disminuya, esperamos tener más cultivo”, concluyó.

Fuente: AGROCLAVE